Los empresarios de la Costa del Sol estamos plenamente concienciados con la necesidad de sacar a nuestro destino turístico de la profunda crisis que ha atravesado durante los últimos años, y que ha afectado tanto al turismo como al sector inmobiliario. Por eso me alegra especialmente leer noticias que hablan de indicios de recuperación en nuestro mercado, tal y como publicaba este lunes José María Camacho en su columna de El Economista.
El periodista describe cómo nuestra Costa del Sol empieza a despuntar como un lugar de oportunidades para inversores, despertando el entusiasmo sobretodo entre el público extranjero, que acude atraído por la oportunidad que suponen los proyectos de calidad que los empresarios estamos presentando.
Según expone Camacho, distintos expertos económicos y líderes empresariales han pronosticado que Málaga y Marbella serán las primeras ciudades junto a Madrid y Barcelona en salir de la crisis. Hablan de una recuperación rápìda, que tendrá como requisito indispensable que las empresas sean más innovadoras a la hora de buscar la diferenciación, aprovechen las ventajas de las nuevas tecnologías y refuercen sus estrategias de internacionalización.
Inversores rusos en el stand de La Reserva de Marbella
Por desgracia, no esto todo tan fácil como lo pintan…los bancos son los primeros que dificultan muchas operaciones, haciendo que queden paralizadas durante mucho tiempo. Muchos inversores se cansan de esperar y buscan su oportunidad en otros países donde la burocracia vaya más rápido, lo que nos está llevando a perder muchas oportunidades.
Desde aquí quiero hacer un llamamiento a nuestras autoridades, para que faciliten los trámites que permitan la entrada de inversión extranjera y obliguen a los bancos a agilizar un proceso que se eterniza. Tenemos que ser competitivos no solo en cuanto a atractivos del destino o calidad de los proyectos, sino también en eficiencia y competitividad empresarial. Este es el camino para salir de la crisis.